Su voz es inconfundible y su rostro uno de los más conocidos de la escena española. La actriz Verónica Forqué lleva más de cuarenta años siendo una de las grandes de la cinematografía de nuestro país desde que debutó en 1972 en Mi querida señorita, del director Jaime de Armiñán. En cambio, el gran salto en su carrera vino de la mano de Pedro Almodóvar, cuando la convirtió en la entrañable Cristal en ¿Qué hecho yo para merecer esto?, en 1984.
En
una reciente entrevista en el Hotel Emperador de Madrid, la artista ha revelado que cada proyecto se escoge “muy de corazón”. Un pálpito sincero es la causa de su decisión de subir este 2015 a las tablas del Teatro Rialto, a pocos metros del hotel, donde se acaba de estrenar Buena Gente, una de las obras más premiadas de Broadway, escrita por el Premio Pulitzer David Lindsay-Abraire, y ganadora del prestigioso Premio Tony en 2011. “Supe de inmediato que era para mí y conforme leía la obra, iba diciendo yo misma lo que decía mi personaje. Eso no pasa casi nunca”, confiesa la actriz.
Buena gente es una obra sobre la realidad, sobre personas normales que tienen que hacer frente a problemas, como llegar a fin de mes. Margarita (Verónica Forqué), es una mujer de casi sesenta años, madre soltera de una chica discapacitada de cuarenta, cuyo único momento de paz se repite tan sólo las tardes que pasa con sus amigas en el bingo. O por lo menos lo era, hasta el momento en el que es despedida, pues todos sabemos que, hoy por hoy, las ofertas de trabajo para una mujer de su condición no son el pan de cada día.
Sin embargo, la vida está llena de sorpresas, y todo puede cambiar en un segundo. Esto ocurre cuando se reencuentra, pasados cuarenta años, con Raúl (Juan Fernández), el amor de su juventud que, en una situación totalmente opuesta a la de la protagonista, se ha convertido en un médico de gran prestigio. Margarita, que nunca antes había pedido ayuda, tal vez tenga que hacer una excepción con su antiguo amor si quiere dejar de preocuparse de pagar sus facturas.
Completan el reparto Pilar Castro, Susi Sánchez y Diego París, de la mano del director David Serrano, que se ha encargado de la adaptación al castellano de una obra que refleja la vida misma. «Habla de héroes del día a día, de personas luchadoras y de un tema tan actual como la falta de oportunidades. Como le sucede a mi personaje, Margarita, una mujer madura con una hija discapacitada que se queda sin trabajo, pero es una mujer que lucha, que no tira la toalla y nos gusta ver personas así», describe Forqué.
